** Las altas temperaturas podrían prolongarse hasta mediados de agosto.
Las más altas temperaturas del año en el territorio nacional aparecen durante julio y agosto, sin fechas de inicio y de terminación fijas. Se trata de la canícula, un fenómeno natural que se presenta cada año y nada tiene que ver con el cambio climático.
En los territorios desérticos del norte del país, las temperaturas extremas pueden rondar los 50 grados centígrados a la intemperie en las horas más soleadas del día.
En Colima, los registros más altos hasta ahora han sido de 38 grados en algunas zonas como Cerro de Ortega y las cercanas a la cuenca del río Armería. Ahí, la sensación térmica en las horas más soleadas puede ser de 40 grados o más.
Las lluvias aminoran la temperatura y refrescan el clima. Para esta semana, el Servicio Meteorológico Nacional pronostica precipitaciones pluviales en varias regiones del país, incluido el occidente por la confluencia de la onda tropical 15 con canales de baja presión en partes altas de la atmósfera y la humedad del océano Pacífico.
Los calores de la canícula traen aparejados riesgos sanitarios. Los bochornos, golpes de calor y deshidratación severa son algunos que pueden evitarse con la ingesta de abundante agua y bebidas con electrolitos así como evitar exponerse al sol en horas de más intensa radiación. Con las altas temperaturas, los alimentos se descomponen más rápidamente, por lo que deben consumirse frescos o guardarse a bajas temperaturas en el refrigerador. Los alimentos en descomposición contienen bacterias y virus que, si se comen, infectan el aparato gastrointestinal.