** Choque de 2 tráileres en Zapotlán obstruye la circulación de Colima a Guadalajara durante medio día.

La autopista Manzanillo-Colima-Guadalajara se ha convertido, desde varios años atrás a la fecha, en la carretera de la muerte y en tapón frecuente a la circulación de vehículos de carga, de pasajeros y particulares.

Con cuotas elevadas en las casetas de peaje a lo largo de casi 300 kilómetros, es frecuente que se obstruya la circulación por accidentes. Las empresas concesionarias de la autopista nunca devuelven el pago a los conductores y sólo recomiendan “tomar rutas alternas”.

La madrugada de ayer ocurrió un accidente, uno más, en el kilómetro 81 de esa autopista en las inmediaciones de Ciudad Guzmán. Un tráiler chocó a otro que se encontraba estacionado en el acotamiento al parecer por una falla mecánica, informó Protección Civil Jalisco. Ambos vehículos se incendiaron tras el impacto y 2 personas fallecieron, al parecer los conductores.

Uno de los vehículos transportaba barriles de thíner, una sustancia líquida que se volatiliza apenas entra en contacto con el aire y facilita la combustión.

Alrededor de las 2 de la tarde de ayer, apenas se había reabierto un carril en sentido de Colima a Guadalajara. En ese momento, la fila de camiones de carga, de pasajeros y automóviles particulares se extendía por más de 10 kilómetros a partir del accidente.

En la autopista, cuya vigilancia está a cargo de la Guardia Nacional de Carreteras, no se aplican controles de velocidad ni revisiones a los conductores de tráileres.