** La Universidad de Colima alberga la cámara anecoica más grande de América Latina, una instalación clave para pruebas en sectores como el automotriz, aeronáutico, espacial, telecomunicaciones y electrónica de consumo.

Todos los dispositivos eléctricos y electrónicos que usamos, desde electrodomésticos hasta equipos médicos e industriales, deben ser sometidos a pruebas rigurosas en una cámara anecoica, un espacio diseñado para medir las emisiones y compatibilidad electromagnética de los aparatos. La Universidad de Colima alberga la cámara anecoica más grande de América Latina, una instalación clave para pruebas en sectores como el automotriz, aeronáutico, espacial, telecomunicaciones y electrónica de consumo.

El término anecoico proviene del griego a- (sin) y echo (eco), y literalmente significa “sin eco” o “sin reflejo de sonido o radiación”. Se utiliza principalmente en contextos científicos y técnicos para describir espacios diseñados para eliminar las reflexiones de ondas, ya sea de sonido (acústicas) o de radiación electromagnética.

El profesor investigador de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME) y responsable técnico de la cámara, José Luis Álvarez Flores, destacó su importancia en una entrevista. Explicó que “no todos los dispositivos eléctricos o electrónicos en el mercado han pasado por evaluaciones de compatibilidad electromagnética, especialmente aquellos que se importan sin cumplir con normativas estrictas en las aduanas”.

Álvarez ejemplificó los riesgos al mencionar un marcapasos. “Si recibe una radiación inadecuada de otro dispositivo cercano, podría causar problemas graves a una persona. De igual manera, en un avión, estas interferencias podrían comprometer la seguridad de todos a bordo”.

El doctor en ingeniería por la Universidad Autónoma de Zacatecas explicó que, dentro de la cámara, se evalúa la compatibilidad de los dispositivos electrónicos con otros aparatos. Como ejemplo, mencionó que un teléfono móvil debe ser capaz de funcionar correctamente cerca de una impresora o un reproductor de discos. Si los dispositivos no son compatibles, podrían presentar fallas operativas que, en ciertos casos, resultarían riesgosas.

La cámara anecoica, ubicada en el Tecnoparque Industrial de Los Limones, está completamente blindada con metal y recubierta en su interior con pirámides de poliuretano llamadas absorbers, que eliminan las microondas eléctricas evitando rebotes. Esto permite simular condiciones espaciales para analizar emisiones de equipos electrónicos de alta precisión, como los utilizados en las industrias satelital y geoespacial. Incluso está diseñada para alojar un automóvil completo y funcional durante las pruebas.

Durante la entrevista, los estudiantes del quinto semestre de la Ingeniería en Sistemas Electrónicos y Telecomunicaciones, Carlos Daniel Barrera Carrillo, Héctor Jesús Torres Barragán y Guillermo Emanuel Nieto Cernas ejecutaron una prueba para controlar alturas del mástil, posición de la tornamesa (discos giratorios) en el suelo y pudieron medir antenas para ubicar su ángulo de transmisión al emitir radiofrecuencias.

Además, Christian Carolina Gallegos Magaña, responsable del área de desarrollo sostenible de la Dirección General de Vinculación, informó que la cámara ya ha sido utilizada por una empresa automotriz internacional con sede en México. “Estamos promoviendo estos servicios en foros internacionales para atraer más clientes en sectores que requieren pruebas de emisiones y certificaciones para sus productos”, afirmó.

La cámara anecoica de la UdeC representa un recurso invaluable para la industria, al garantizar que los dispositivos electrónicos sean compatibles, seguros y funcionales en entornos complejos. Para más información sobre sus servicios, se puede visitar el sitio oficial: https://ideas.ucol.mx/laboratorio_anecoico/.