Juan Carlos Estrada

Periodismo

A propósito de dos trascendentes hechos, uno de ellos ocurrido este fin de semana y otro próximo a suceder, se dieron dos declaraciones de la presidenta Claudia Sheinbaum que pudieran evidenciar lo que tal vez sea la visión personal que tiene de la libertad de expresión.

El pasado domingo, la presidenta Sheinbaum, en gira de trabajo por la ciudad de La Paz, Baja California Sur, para anunciar la realización de diversas obras de infraestructura, aprovechó para hablar de la elección de ministros, magistrados y jueces, que se vivirá  el primero de junio.

En la capital sudcaliforniana, la titular del Poder Ejecutivo Federal, en claro tono de queja, expresó su molestia por lo que ella llamó, “ya arreciaron las críticas” contra la próxima jornada comicial.

“Y como ya va a ser la elección del 1 de junio, no pues ya arreciaron las críticas ya (hay) manifestaciones en contra de la elección al Poder Judicial, han arreciado las críticas contra nuestro gobierno, contra todas y contra todos, pero saben que el pueblo de México es mucha pieza y millones y millones van a salir a votar el 1 de junio y van a decir México es un país democrático y en México, el único que decide es su pueblo”, expuso Sheinbaum.

Como sabemos, porque ha sido ampliamente difundido en medios de comunicación y en redes sociales, el sábado el Buque Escuela Cuauhtémoc chocó contra el Puente de Brooklyn, el que une a los distritos de Manhatan y Brooklyn divididos por el East River, en Nueva York, Estados Unidos, lo que ocasionó la muerte  de dos tripulantes de la embarcación y lesiones a otras 22 personas.

Este lunes, la Presidenta Claudia Sheinbaum calificó de mezquinos a quienes han criticado a la Secretaría de Marina y a su gobierno, tras el accidente del Buque Escuela.

«Ahora, ¿cómo catalogo yo este ataque que recibió la Secretaría de Marina y el Gobierno?, mezquino, no tiene otro objetivo, es mezquindad. Sobre todo cuando dos jóvenes fallecieron en vez de haber una solidaridad, un apoyo, un reconocimiento, porque la Marina Armada de México es una institución gloriosa del Estado Mexicano», comentó Sheinbaum en su conferencia de prensa.

Criticar la elección de integrantes del Poder Judicial no debería ser preocupación de la Presidenta de México y menos cuando habla de democracia, pues la crítica al poder público sin la descalificación del propio poder, es algo que distingue a las naciones cuya cotidianeidad es la vida en democracia. Qué bueno sería si Sheinbaum analizara las críticas y éstas le sirvieran para mejorar la gobernanza, pero no, lo que le molestó y expresó sin ruborizarse en La Paz, es que se critique a su gobierno y a la reforma que López Obrador propuso y ella respaldó e impulsó.

Respecto a la declaración de este lunes, me parece un enorme despropósito calificar de mezquinos a quienes hayan criticado a la Semar y al Gobierno de México por el lamentable accidente del sábado. Sí, la Secretaría de Marina es una de las instituciones mejor calificadas por las y los mexicanos, sin embargo, su actuación está sujeta al escrutinio ciudadano, a la crítica pues, ya que esa dependencia opera con recursos públicos, con el dinero que mexicanos y mexicanas le damos a través del pago de los impuestos. Ojalá Sheinbaum corrija, que así como la demócrata que ella asume es, no descalifique a los críticos del poder público que ella encarna. Su liderazgo político y social es enorme, está obligada a ejercerlo con responsabilidad, respetando y fomentando, entre otros, el derecho humano a la libre expresión, pues al ser una gran influenciadora, lo que ella diga sí importa.