** La Asociación Global sobre Inteligencia Artificial busca formar a estudiantes de América Latina en el desarrollo de la IA “centrada en el ser humano, con el enfoque de ejercerla de manera responsable y con ética”, comentó el estudiante Roberto Enrique.

Roberto Enrique Ramos Rivera, alumno del segundo semestre de la Maestría en Tecnologías de Internet de la Facultad de Telemática de la Universidad de Colima participa en el verano de investigación que promueve la Asociación Global sobre Inteligencia Artificial, con sede en la UNAM.

Esta Asociación trabaja para formar en América Latina futuros expertos en Inteligencia Artificial responsable y centrada en el ser humano. Durante este verano, dijo Ramos Rivera, colaborará de mayo a septiembre con la renombrada investigadora, Saiph Savage, profesora asistente de informática en la Universidad Northeastern  de Boston, Massachusetts, y directora del Laboratorio Cívico de Inteligencia Artificial.

Durante estos meses estará desarrollando su proyecto de investigación de tesis orientado al área de inteligencia artificial con los nuevos modelos lingüísticos. Él hace un planteamiento sobre el uso de esas herramientas para analizar información cualitativa de encuestas.

Explicó que su proyecto de tesis se enfoca al uso de la IA y los modelos lingüísticos, como son los chatbots, programas informáticos que simulan la conversación humana con un usuario final. 

No todos los chatbots están equipados con inteligencia artificial, comentó, “pero los chatbots modernos utilizan cada vez más técnicas de IA conversacional, como el procesamiento de lenguaje natural”.

Comentó que el verano en que participa es ofrecido por la Asociación Global sobre Inteligencia Artificial, que tiene el objetivo de formar a estudiantes de América Latina sobre el desarrollo de la IA “centrada en el ser humano, con el enfoque de ejercerla de manera responsable y con ética”.

El GPAI, que fue propuesto inicialmente por Canadá y Francia en la cumbre del G7 de 2018 y lanzado oficialmente en junio de 2020, se enfoca en el desarrollo responsable de la IA que respete los derechos humanos y valores democráticos compartidos. 

Se fundó oficialmente el 15 de junio de 2020 con 15 miembros: Australia, Canadá, Francia, Alemania, India, Italia, Japón, México, Nueva Zelanda, República de Corea, Singapur, Eslovenia, Reino Unido, Estados Unidos y la Unión Europea.

Con sede en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), este grupo fomenta la colaboración entre expertos de diversos sectores para maximizar los beneficios de la IA mientras se mitigan sus riesgos potenciales.

La AGIA busca cerrar la brecha entre la teoría y la práctica apoyando la investigación y las actividades aplicadas en áreas que son directamente relevantes para los formuladores de políticas en el ámbito de la IA. Reúne a expertos de la industria, la sociedad civil, los gobiernos y el mundo académico, quienes colaboran en los desafíos y oportunidades que presenta la inteligencia artificial.

Ramos Rivera señaló que “las malas prácticas de estas tecnologías conllevan grandes riesgos, por ese motivo este grupo se centra en un enfoque ético”.

En verano, además de cursos de IA, recibirá capacitación sobre cómo integrar todas estas tecnologías con el objetivo de centrarlas en actividades humanas y con base a ello contribuir al desarrollo de estas herramientas con un soporte ético y en beneficio de la gente.

Destacó que la tecnología avanza más rápido de lo que se regula, por eso uno de los propósitos a nivel mundial es encaminar las buenas prácticas al desarrollo de la IA centrada en el humano.