Armando Martínez de la Rosa
** Lo decreta la alcaldesa Karen Bass para contener la violencia y evitar los saqueos. ** Llegan 700 marines enviados por Trump a Los Ángeles.
Para contener la violencia y evitar los saqueos a negocios, la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, decretó ayer toque de queda en el centro de la ciudad. Durará varios días, advirtió.
El toque de queda entró en vigor anoche a las 8 y se termina a las 6 de la mañana. Se aplicarán excepciones a personas residentes en el área del toque de queda, a quienes se trasladan a su trabajo o regresan de él, a periodistas que se identifiquen con credencial de su medio y en caso de emergencias médicas, dijo.
La medida restrictiva se aplicará sólo en un área de una milla cuadrada (equivalente a la superficie de un kilómetro 690 metros por un kilómetro 690 metros, esto es, 2 millones 588 mil 881 metros cuadrados, más o menos un área de entre 400 y 550 canchas de futbol.) La ciudad de Los Ángeles tiene una extensión de 500 millas cuadradas, precisó la alcaldesa Bass.
A media tarde, la policía comenzó a lanzar bombas aturdidoras y gases lacrimógenos para dispersar las protestas. Las fuerzas del orden se mantienen en un operativo permanente, mientras helicópteros policíacos sobrevuelan la ciudad angelina.
Los 700 marines enviados por Donald Trump a California se desplegaron ayer por el estado, aunque se concentraron principalmente en Los Ángeles. Se trata de una medida unilateral de Trump, pues el gobierno estatal no ha solicitado las tropas federales. Se suman a los 4 mil elementos de la Guardia Nacional también enviados por la Casa Blanca a la segunda ciudad más grande de Estados Unidos para acallar las protestas contra las redadas contra migrantes que comenzaron el viernes reciente.

Trump justificó la intervención militar diciendo que Los Ángeles ha sido invadida “por un enemigo extranjero”.
En el fondo, Trump intenta desprestigiar al gobernador de California, Gavin Newsom, con quien tiene un enfrentamiento abierto desde los incendios forestales de principios de año. En ese tiempo, Trump acusó a Newsom de inepto ante los incendios e incluso lo insultó deformando su apellido y llamándolo “Newscum”, un juego de palabras que significa en inglés “nueva escoria”. California es de preferencias demócratas y significó un escolló siempre para los republicanos. Newsom aspiraba a ser el candidato presidencial del Partido Demócrata el año pasado, cuando Biden declinó la postulación. Trump consideró al californiano un adversario peligroso. De ahí viene la agresividad turmpiana contra Newsom.