Armando Martínez de la Rosa

** En la lista tarifaria de Donald Trump, tampoco apareció Canadá.

En apariencia, México y Canadá habían librado los aranceles de Donald Trump. Ninguna de las 2 naciones socias comerciales de Estados Unidos apareció en la lista inicial tarifaria que mostró ayer el presidente estadounidense en la Casa Blanca, en el por él llamado “día de la liberación” económica de su país.

Pero más tarde se supo que sí aplicará tasa de 10 por ciento a las exportaciones mexicanas de cualquier género, además de la de 25 por ciento al acero y el aluminio anunciada por Trump semanas atrás y a los automóviles.

En su conferencia de prensa, Trump se refirió a México y Canadá y dijo que Estados Unidos no debe pagar los déficits de sus socios. “En el caso de México, son 300 mil millones de dólares al año. En el caso de Canadá, cerca de 200 mil millones de dólares al año”, precisó.

Con todo, las cifras no son precisas. En realidad, la diferencia del comercio entre México y Estados Unidos en 2024 fue de 171 mil millones de dólares favorables a México. El total de las exportaciones mexicanas al vecino del norte el año pasado fue de 505 mil millones de dólares y las estadounidenses a México fueron por 334 mil millones de dólares.

La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que hoy, jueves, dará a conocer las medidas que tomará México ante los aranceles estadounidenses y adelantó que el plan de fortalecer el mercado interno se aplicará. Se impulsará la marca Hecho en México.

En la tarde de ayer, la presidenta Sheinbaum se reunió con asesores económicos y una parte de su gabinete para analizar las medidas tomadas por Washington.

Hay confusión acerca de si las mercancías que cumplen con el T-MEC mantendrán un arancel de 0 por ciento, pero a las que incumplen el tratado les aplicará un arancel de 25 por ciento. En el caso de productos energéticos y el mineral de potasa que incumplan el T-MEC, la tasa será de 10 por ciento.

Como fuere, los bienes no amparados por el T-MEC e incumplan sus normas, tendrán una tasa de 12 por ciento.

Trump expresó su reiterado argumento de inequidad en el comercio exterior de Estados Unidos, que cobra tasas mínimas a las exportaciones de Europa, Asia y hasta África, pero les imponen altas tarifas a las mercancías exportadas por ese país. Los aranceles equilibrarán el comercio para que Estados Unidos recupere dinero y atraiga inversiones y genere trabajo en su territorio. Es un robo, aseguró.

El T-MEC con México y Canadá, dijo el mandatario, es un grave error de Estados Unidos, a pesar de que él mismo lo negoció y lo firmó en su primer periodo presidencial.

Es probable que ese señalamiento sea un anticipo de su pretensión de anular el T-MEC, que se revisará en 2026, o de diseñarlo a modo de los intereses de Washington.

Al mostrar Trump una tabla de aranceles, China aparece en primer lugar. Le aplica a Estados Unidos tarifas de 67 por ciento, por lo que Washington le cobrará una tasa de 34 por ciento. Vietnam impone a Estados Unidos aranceles de 90 por ciento y ahora el país asiático pagará 46 por ciento. Corea del Sur le cobra 50 por ciento y en consecuencia pagará 25 por ciento. Incluso Israel, que cobra 33 por ciento, pagará 17 por ciento.

Las tasas de Estados Unidos impuestas a decenas de países son en promedio la mitad de lo que le cobran por sus exportaciones. “No las aplicamos iguales porque no resistirían”, aseguró.