Armando Martínez de la Rosa

** En Washington, escándalo por filtraciones de conversaciones militares secretas a periodista. ** Mueren 4 soldados estadounidenses que participaban en ejercicios militares en Lituania, nación fronteriza con Rusia y contraria a Putin.

En Washington, 2 asuntos graves militares y de seguridad ocuparon ayer la atención de la Casa Blanca y el enojo de Donald Trump: la muerte de 4 soldados estadounidenses en Lituania y la filtración a un periodista de conversaciones militares secretas en preparación del bombardeo a terroristas hutíes en Yemen, el 15 de marzo.

EL PRIMERO

El primer escándalo en Washington lo generó el asesor de Seguridad Nacional de Donald Trump, Mike Waltz, quien organizó un chat para tratar asuntos del ataque aéreo a los terroristas hutíes de Yemen y en el que incluyó al editor del diario The Atlantic, Jeffrey Goldberg.

El 13 de marzo, un grupo de altos mandos militares y políticos -entre ellos el vicepresidente JD Vance y el secretario de Defensa, Peter Hegset-, y de seguridad nacional fue incluido en el chat de la aplicación Signal por orden de Waltz y lo ejecutó su ayudante, Alex Wong, quien incluyó por error al periodista.

En el chat se discutieron planes y detalles del ataque aéreo de Estados Unidos en Yemen contra terroristas islamistas hutíes, que se desarrolló el 15 de marzo.

Después del bombardeo, Goldberg publicó en The Atlantic las conversaciones e incluso capturas de pantalla de las conversaciones. Aunque la publicación no tuvo consecuencias militares porque apareció posteriormente a las incursiones de los bombarderos de Estados Unidos, reveló las graves vulnerabilidades de la seguridad militar de Washington.

Luego de la furia de legisladores demócratas y republicanos por las filtraciones, Mike Waltz asumió públicamente el error. Trump trató de restar importancia al hecho, pero llamó “estúpido” a su asesor en Seguridad Nacional. Luego, comisionó a Elon Musk para investigar el origen de la filtración.

El Senado anunció el inicio de una investigación de fondo sobre el error. Algunos senadores han demandado ya la renuncia del secretario Hegset y del propio Waltz.

EL SEGUNDO

El segundo escándalo fue la confirmación, ayer, del secretario general de la OTAN, Mark Rutten, de que 4 soldados estadounidenses fueron localizados muertos en Lituania, donde participaban en ejercicios militares. Lituania, que se independizó de Rusia luego de la caída del régimen socialista, mantiene relaciones tensas con Moscú y su presidente, Gitanas Nauseda, ha estado abiertamente contra la invasión rusa a Ucrania, acaso en previsión de otra invasión militar de Rusia con la que tiene frontera.

“El Ejército de Estados Unidos dijo que el vehículo Hércules en el que viajaban los cuatro soldados durante un entrenamiento fue encontrado sumergido en un cuerpo de agua. Indicó que el Ejército, Fuerzas Armadas de Lituania y agencias civiles llevaban a cabo labores de recuperación”, informó la agencia AP.

Los países bálticos de Lituania, Letonia y Estonia pertenecen a la OTAN y a menudo han tenido relaciones frías con Rusia, un aliado clave de Bielorrusia, desde que se independizaron de la Unión Soviética en 1990.

Las relaciones se deterioraron aún más después de que Rusia lanzó su invasión a gran escala de Ucrania en 2022, y el presidente lituano Gitanas Nausėda ha sido uno de los defensores más abiertos de Ucrania en su lucha contra las fuerzas del presidente ruso Vladímir Putin.

Las repúblicas exsoviéticas Letonia y Estonia, vecinas de Lituania, en las mismas condiciones geopolíticas y con frente al mar Báltico, y frontera con Rusia, Bielorrusia (aliado incondicional de Moscú) y Polonia, sostienen frías relaciones con el gobierno de Putin desde su independencia a la caída del régimen comunista. Los 3 países pertenecen a la OTAN. En caso de agresión a una nación socia de la OTAN, ésta deberá responder militarmente de inmediato en su defensa, aunque previamente necesita la autorización unánime de los países miembros.

(Foto: Mike Waltz, asesor de Seguridad Nacional de Donald Trump.)